La Comunidad Soto Zen de Colombia y la reserva natural Kasaguadua se han unido para promover la práctica de zazen como expresión del voto de aliviar el sufrimiento y en un compromiso ligado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDGs) de la Sotoshu para proteger la naturaleza y salvaguardar la vida.

Kasaguadua es una reserva natural de 12 hectáreas en la que afloran cinco nacimientos de agua. Las construcciones consistentes en su mayoría en pequeños dodecaedros fabricados con materiales reciclados y con la guadua extraída del mismo bosque, que es necesario cortar para ayudar a la regeneración del hábitat de numerosas especies. El sistema de purificación de los desechos, llega a regresar a la naturaleza agua al 100% de pureza. La reserva es visitada frecuentemente por organizaciones nacionales y extranjeras que buscan aprender de este modelo de convivencia armoniosa con el bosque, sin prescindir de los beneficios que ofrece la conexión de Internet con el resto del mundo, y sin algún impacto negativo sobre el entorno. La reserva ofrece estadías para turistas en sus pequeños módulos, alimentación y recorridos guiados por el bosque donde se puede comprender la íntima interrelación de todo lo que en él vive. Entre las actividades que se ofrecen a los visitantes, está la práctica de zazen en una pequeña maloquita/zendo y en conexión con los practicantes del zazen-virtual de la Comunidad. Practicar zazen en medio de este bosque emula la experiencia del buda Shakyamuni y sus primeros Viharas, donde los monjes pasaban las temporadas de lluvias, morando en paz. El primer templo que recibió el Buda fue un Bosque de bambú.

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